viernes, 1 de febrero de 2013

Salmo 74, La copa de la amargura Padre Carlos G. Valles, S.J.


Salmo 73 (72)  B. Jerusalén

1.         Un itinerario de la crisis hasta la fe (v.1b-17)


                                                                        Tesis

1b En verdad bueno es Dios para Israel,
el Señor para los de puro corazón.

a)        El malvado (v.2-12)

2 Por poco mis pies se me extravían,
nada faltó para que mis pasos resbalaran,
3 celoso como estaba de los arrogantes,
al ver la paz de los impíos.

4 No, no hay congojas para ellos,
sano y rollizo está su cuerpo,
5 no comparten la pena de los hombres,
con los humanos no son atribulados.

6 Por eso el orgullo es su collar,
la violencia el vestido que los cubre;
7 la malicia les cunde de la grasa,
de artimañas su corazón desborda.

8 Se sonríen, pregonan la maldad,
hablan altivamente de violencia:
ponen en el cielo su boca,
y su lengua se pasea por la tierra.

10 Por eso mi pueblo va hacia ellos:
aguas de abundancia les llegan.
11 Dicen: “¿Cómo va a saber Dios?
¿Hay conocimiento en el Altísimo?”

12 Mírenlos: esos son los impíos,
y, siempre tranquilos, aumentan su riqueza.

b)        El justo (v. 13-16)

13 ¡Así que (para qué) en vano guardé el corazón puro,
mis manos lavando en la inocencia,
14 cuando era golpeado todo el día,
y cada mañana sufría mi castigo.

15 Si hubiera dicho: “Voy a hablar como ellos”,
habría traicionado a la raza de tus hijos;
16 me puse, pues, a pensar para entenderlo,
¡ardua tarea ante mis ojos!

c)         Viraje (v. 17)

17 Hasta el día en que entré
     /_ en los divinos santuarios,
donde su destino comprendí.




2.         Experiencia de la fe (v. 18-27)


a)        Destino del malvado (v. 18-22)

18 Oh, sí, tú en precipicios los colocas,
a la ruina los empujas.


19 ¡Ah, qué pronto quedan hechos un horror,
cómo desaparecen sumidos en pavores!
20 Como en un sueño al despertar. Señor
así, cuando te alzas, desprecias tu su imagen.

21 Sí, cuando mi corazón se exacerbaba,
cuando se torturaba mi conciencia,
22 estúpido de mi, no comprendía,
era bestia ante ti.

b)          Destino del justo (v. 23-26)

23 Pero a mí, que estoy siempre contigo,
de la mano derecha me has tomado;
24 me guiarás con tu consejo,
y tras la gloria me llevarás.

25 ¿Quién hay para mí en el cielo?
Estando contigo no hallo gusto ya en la tierra.
26 Mi carne y mi corazón se consumen:
¡Roca de mi corazón, mi porción, Dios por siempre!


c)         Conclusión (v. 27-28)

27 Sí, los que se alejan de ti perecerán,
tu aniquilas a todos los que son adúlteros.
28 Mas para mi, mi bien es estar junto a Dios;
he puesto mi cobijo en el Señor,
/_ a fin de publicar todas sus obras!.




Este salmo me atemoriza, Señor. Tu imagen de juez justiciero, con la copa del castigo en tus manos, acercándola inexorablemente a los labios del pecador y haciéndole beber las heces de  la sentencia eterna, sin que nadie pueda salvarlo. Palabras de temor en salmo de oración.

El Señor tiene una copa en la mano,
un vaso lleno de vino drogado;
lo da a beber hasta las heces
a todos los malvados de la tierra.

Imagen temible de juicio y condena. Pero no quiero ignorarla, Señor; no quiero pasarla por alto, no quiero disimularla. La justicia es parte de tu ser, y la acepto y la adoro como acepto y adoro tu misericordia y tu majestad. Eres el justo juez, y la copa del castigo está en tus manos. Que no me olvida nunca de eso, Señor.

No pretendo escapar del castigo, ni podría aunque quisiera. "Ni del oriente ni del occidente, ni del desierto ni de los montes" le puede venir auxilio al pecador. Conozco mis maldades, y sé que mis labios se han condenado ellos mismos a tocar el borde de la copa de la maldición. Pero no pienso en esconderme y huir. Temo a la copa, pero me fío de la mano que la sostiene. Espero tranquilo la llegada del juez.

Espero sin miedo, porque pienso en otra copa, en otro cáliz, lejano en tiempo, pero cercano siempre a la realidad de la culpa y del perdón. Cáliz de amargura, sufrimiento y dolor. Cáliz de pasión y muerte. Y también ese cáliz estaba en tus manos en la soledad de un huerto donde los rayos tímidos de la luna fría se filtraban estremecidos por el ramaje de olivos venerables hasta el suelo consagrado por un sudor de sangre. El cáliz estaba lleno de licor de muerte. Y no pasó de largo. Fue bebido hasta las heces. Misterio del cáliz de la noche del huerto que perdona el cáliz de castigo destinado a mis labios.

Ésa es, Señor, la grandeza de tu misericordia y la gloria de tu redención. Te he alabado por los cielos y la tierra, por el sol y la luna, y te alabo ahora muchísimo más por la grandeza de tu obra de salvación, por haber redimido al hombre con la vida, la muerte y la resurrección de tu Hijo. Bendito seas, Señor.

Te damos gracias, oh Dios,
te damos gracias
invocando tu hombre,
contando tus maravillas.


Euquerio Ferreras

sábado, 26 de enero de 2013

Extranjeros y salud


       


Convocados por las Delegaciones de Pastoral Penitenciaria, Castilla -León, se han reunido 55 participantes entre Capellanes de prisiones y colaboradores en la Casa de Espiritualidad de Dueñas, el sábado 26 de enero. Sí, junto a la cárcel de la Moraleja. Sí, sí, con ganas e ilusión para comenzar el 2013 con una rica oración inicial.

La ponencia –reflexión- es apetitosa:
“Situación legal de las personas extranjeras ante el derecho a la salud”.

Caminando de la mano de Pilar Sánchez, abogada, de la Asociación Apoyo, nos hemos adentrado en toda esta problemática.
Pilar nos resume su ponencia: Acoger y acompañar, “porque la Institución Penitenciaria está obligada a velar por el derecho a la salud, debe ser prioridad de la misma cuidar por la vida y la integridad de las personas presas.
A la población reclusa se le debe dispensar una atención sanitaria en igualdad de condiciones a la dispensada al conjunto de la población libre.
Los recientes cambios legislativos pretenden eliminar este derecho, asociándolo al concepto de cotización, así el RDL 16/2012 reducen la asistencia sanitaria a las personas extranjera sin papeles a urgencias y la asistencia a menores y embarazadas”.

En la rica interculturalidad de nuestra
sociedad y también de los centros penitenciarios, constatamos que la crisis está golpeando fuerte, también al preso. Hay en España 76.756 presos.

La música de Brasil del P. Zezinho nos acompaña de fondo, nos sitúa en esta realidad económica y religiosa que se hace oración.


POR UN PEDAZO DE PAN

Por un pedazo de pan
y por un poco de vino,
yo he visto a más de un hermano
abandonar su camino.

Por un pedazo de pan
y por un poco de vino,
yo también vi a mucha gente
encontrar nuevamente
un camino de amor. 

Yo también vi a mucha gente
volver nuevamente
al encuentro con Dios.


POR UN PEDAZO DE PAN,
Y POR UN POCO DE VINO,
DIOS SE NOS HIZO MANJAR,
SE NOS HIZO CAMINO.
POR UN PEDAZO DE PAN.
POR UN PEDAZO DE PAN.
POR UN PEDAZO DE PAN.

Que uno puede perder el rumbo es cierto. Que nos engañan, también. Y cómo se agradece la mano amiga del capellán y de sus colaboradores que  animan, orientan en lo religioso, social, jurídico, psicológico, formativo. ¡Es un buen trabajo, con muchos rostros de hermanos necesitados! Creyentes o no. Españoles y extranjeros. Con los presos y sus familias.



        Al no tener vino y pan,
        y por faltarle comida,
        yo vi a más de un hermano,
        amargado de la vida.

        Y  por no dar de su pan,
        y por no dar de su vino,
        he visto  a  más de un creyente
perder de repente el sentido moral,
vi que el camino se hará
si se siembra justicia, amor e igualdad.


POR UN PEDAZO DE PAN. (4 veces)

Por un pedazo de pan
y por un poco de vino,
yo he visto a más de un hermano
volverse un hombre mezquino.

Por un pedazo de pan
y por un poco de vino
vive la gente en conflicto
en un mundo maldito por no repartir,
y la mitad de los hombres
se mueren de hambre y les toca sufrir.

POR UN PEDAZO DE PAN.
POR UN PEDAZO DE PAN.
POR UN PEDAZO DE PAN.
POR UN PEDAZO DE PAN.

 

Emiliano de Topas en Salamanca nos da su opinión y testimonio:
“Si es difícil volver a la sociedad, a la familia,… después de haber pasado por la cárcel; las personas extranjeras lo tienen mucho más difícil; y aún más si no tienen papeles.
Las leyes que en este momento se nos imponen en la vuelta de estas personas a la sociedad están siendo barreras que suponen olvidarles como personas.
Acoger estos derechos y defenderlos, incluso por encima de la ley, es nuestra tarea, y pretendemos dialogar y definir entre quienes los acompañamos”.

Al finalizar la jornada, nos acompañan muchas personas amigas en nuestros trabajos, en nuestras entregas y servicios a favor de los demás. Un grupo de voluntarios que colaboran con nosotros, codo a codo, en la ONG Mateo 25, que en Palencia lleva su nombre.
Nombro a San Mateo. Él está presente y nos recuerda, en nombre del maestro de la Libertad plena, el evangelio:
Estuve preso y me visitasteis (Mt 25, 36).

Euquerio Ferreras